¿Es inminente una crisis mundial del agua? Esta es una de las preocupaciones planteadas por las Naciones Unidas en su último “Informe sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos en el Mundo”. Publicado el 22 de marzo de 2023 con motivo del Día Mundial del Agua, el informe señala que entre 2.000 y 3.000 millones de personas de todo el mundo sufren ya escasez de agua durante al menos un mes al año. Esta situación podría agravarse aún más en los próximos años, sobre todo en las zonas urbanas, debido a factores claramente identificados, como el cambio climático y el aumento del número de personas que viven en las ciudades. Además de para los humanos, estos riesgos de escasez también representan una amenaza para el mundo vegetal y animal. El agua es nuestro futuro común, y es esencial que actuemos juntos para compartirla equitativamente y gestionarla de forma sostenible”, resumió Audrey Azoulay -Directora General de la UNESCO- cuando se publicó el informe. Es urgente establecer mecanismos internacionales sólidos para evitar que la crisis mundial del agua se descontrole”.

Actuar no sólo sobre la cantidad, sino también sobre la calidad del agua

Seamos claros: aunque es esencial que los gobiernos de todo el mundo actúen de forma decidida y coordinada en esta cuestión, el mundo empresarial también debe implicarse. Las grandes organizaciones, tanto privadas como públicas, deben tomar medidas para gestionar su consumo de agua de forma más eficaz. La primera medida es obvia. Se trata de reducir el consumo de cada actor, mediante la aplicación de buenas prácticas en el uso del agua, así como de soluciones técnicas de medición y optimización del consumo. Además de este esfuerzo, los agentes económicos deben esforzarse más por medir y controlar los impactos directos e indirectos de sus actividades cotidianas (industria, energía, agricultura, etc.) sobre el estado de los recursos hídricos y la calidad del agua. Aunque a menudo se pasa por alto, el cambio climático está alterando no sólo la cantidad de los recursos hídricos, sino también su calidad y la de los ecosistemas que alimentan. En Francia, por ejemplo, el aumento de las temperaturas en los ríos está reduciendo los niveles de oxígeno disuelto en el agua, lo que afecta a las poblaciones de peces.

La contribución de la modelización a la protección de los medios acuáticos

Para hacer frente a todos estos retos, las empresas disponen ahora de nuevas herramientas de medición y optimización, derivadas en particular del mundo de la IO y la IA. Entre ellas se incluyen herramientas de modelización que pueden ayudar a prevenir fluctuaciones cuantitativas y cualitativas en los sistemas acuáticos. A partir de datos como la meteorología, los caudales de agua o los cambios en la temperatura de los ríos, la modelización puede utilizarse para representar un entorno acuático en 3D. Es decir, un gemelo digital del medio natural observado (lago, río, etc.). Esta herramienta incorpora algoritmos y conocimientos fisicoquímicos y biológicos. Este doble permitirá analizar y anticipar los cambios de un medio acuático en los próximos meses y años, incorporando los efectos estimados del futuro calentamiento global. Se corregirá así una deficiencia importante de los estudios tradicionales de impacto de los proyectos hidráulicos, que rara vez tienen en cuenta el cambio climático en sus conclusiones. Por último, la modelización de la evaporación del agua -actualmente en fase de investigación y desarrollo- debería estar pronto a disposición de los usuarios de estos modelos.

Próximas aplicaciones pioneras

Sobre el terreno, ya hay muchos ejemplos de utilización de estos modelos. La gran variedad de aplicaciones posibles de estas tecnologías para tratar distintos problemas relacionados con el agua es un testimonio de la riqueza de las aplicaciones potenciales. En África, las herramientas de modelización se utilizan para evaluar el impacto de la construcción de presas en bosques, lagos y ríos. La máxima prioridad es garantizar el acceso al agua de las ciudades y pueblos circundantes. En Francia, en el marco del programa ATARA (Assistance Tool for wAter Resources mAnagement), los equipos de SEGULA Technologies colaboran con los de la Office Français de la Biodiversité y el INRAE para automatizar la modelización de las masas de agua francesas y su calidad. Esta herramienta es especialmente útil en las zonas de montaña, donde se requiere una gestión precisa de los recursos hídricos a lo largo de toda la cadena montañosa. En España, se utilizan herramientas de modelización basadas en mediciones e imágenes de satélite para optimizar el uso del agua en la producción de arroz. Por último, las herramientas de modelización también ofrecen soluciones pertinentes en el ámbito de la producción de energía nuclear. Las centrales nucleares necesitan agua de refrigeración, a menudo procedente de ríos. Esto puede ser problemático durante las olas de calor. Estas herramientas pueden ayudar a adaptar el sistema de producción de electricidad para hacer frente a temperaturas más elevadas. Tantos ejemplos concretos que demuestran la contribución crucial de las tecnologías de modelización al servicio de nuestro bien común por excelencia: el agua. Corresponde a los responsables públicos y privados intensificar el uso de estas herramientas en los próximos años. Ni que decir tiene.